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GASPAR NAVARRO

Hermosillo seguirá siendo “Ciudad Ford”

El pueblo de Cananea es el vivo ejemplo de lo contraproducente que puede ser que la economía de un pueblo dependa solo de un sector productivo.

La economía de Cananea dependía solo del sector minero, por ser la empresa cuprífera del Grupo México su principal sustento, al generar su inversión la mano de obra directa y beneficiar a proveedores locales.

La economía de Cananea no se ha diversificado, vive de la minera de Cananea desde hace décadas, y apenas da sus primeros pasos con un proyecto de cultivo de uva, que es insuficiente para dar de comer al pueblo. Ha sido y sigue siendo rehén del Grupo México.

Hace más de dos décadas, en algunas bardas de Cananea destacaba la frase “Te Imaginas”, siendo aclarado el misterio por un vecino del mineral que atribuía esa leyenda a una estrategia de la empresa entonces llamada Minera de Cananea, para generar el temor por lo que pasaría si cerraba operaciones la empresa cuprífera, y así tenerlos temerosos y domesticados, porque obviamente su cierre sería la muerte para ese pueblo, cuna de la Revolución Mexicana.

Pero en los años noventas estalló la huelga en la minera de Cananea, y por años se mantuvo cerrada por problemas sindicales, llegando la recesión a ese municipio, viviendo a pan y agua por largo tiempo al no diversificar su economía. Cananea y los cananenses dependían casi al cien por ciento de la mina.

El pueblo se mantuvo estoico por largos años, hasta que con la complicidad del gobierno federal la compañía minera eliminó el Contrato Colectivo de Trabajo con la Sección 65 del Sindicato Minero Nacional, y al eliminarse al sindicato se acabaron sus problemas por la huelga, y se reabrieron las puertas de la empresa cuprífera.

La víbora cambió de piel al convertirse en Buena Vista del Cobre, y siguió sacando cobre de las entrañas de Cananea con trabajadores mineros importados y esquiroles, hasta nuestros días, por lo que Cananea vivió para contarla, y sufrió al hacerse realidad la amenazante frase del “Te Imaginas”.

Lo mismo pasa con Hermosillo, al ser un pueblo maquilador, y desde hace tres décadas es considerada “Ciudad Ford” por la operación de la Planta Ensambladora, que genera más de dos mil empleos directos y cientos más indirectos.

No se necesitó pintar la frase “Te Imaginas” en bardas o en el Cerro de la Campana” de la ciudad naranjera para que los hermosillenses supieran lo que podría pasar si cerraba sus puertas la millonaria inversión de prestigiada compañía ensambladora automotriz.

Hermosillo siguió los pasos de Cananea al depender su economía de la Planta Ensambladora Ford, y de otras maquiladoras de menor rango, luego de que se vino a pique la producción agropecuaria junto con la otrora gloriosa fama de lo sonorenses de “Agrotitantes”, al quedar para la historia eso de que era “el granero de México”. La capital del noroeste se convirtió en un pueblo maquilador.

Hermosillo, se convirtió en “Ciudad Ford”, y por tres décadas los hermosillenses orgullosos de serlo y parecerlo. Hasta que llegó Trump al gobierno de Estados Unidos con amenazas de altos aranceles, a empresas gringas que inviertan fuera de su país, sintiendo Hermosillo los primeros efectos trumpianos al cancelarse el ensamble del Focus para trasladar la producción a China, llegando el segundo golpe con el rumor de la cancelación del Fusion, auto que junto con el Lincoln MKS dan sustento a la ensambladora hermosillense.

Bueno ser pueblo maquilador no es malo, solo riesgoso, al depender de inversiones extranjeras volátiles, pero mientras vuelan o cancelan sus inversiones, dejan una gran derrama económica como lo hemos visto en Hermosillo con la llegada de millonarias inversiones de otros países no solo de Estados Unidos, en sectores novedosos, como el de la industria aeroespacial. Por esas nuevas inversiones ajenas al tradicional sector primario, Sonora ha generado en estos dos primeros del gobierno de Claudia Pavlovich 42 mil nuevos empleos en diversos sectores de la economía.

Total, que si el Fusion y la Planta Ford agarran rumbo hacia China, Hermosillo ya no es el pueblo de hace tres décadas que dependía de su sustento en su mayor parte de la ensambladora automotriz, sino que ya diversificó su economía con la llegada de nuevas inversiones en diversos rubros.

De cualquier forma, llega el respiro de aliento con la información oficial del secretario de Economía, Jorge Vidal Ahumada, en el sentido de que la Planta Ford de Hermosillo no proyecta en el corto tiempo enviar la producción del modelo Fusion a China.

El Secretario de Economía en Sonora declaró que el Director de Relaciones Públicas de Ford México, Raúl del Campo, le confirmó la continuidad de este proyecto en la planta ubicada en la capital de Sonora.

El funcionario estatal señaló que el Fusión se mantiene en la entidad con la producción que indique el mercado, así como con las modificaciones en el tercer turno que se anunciaron anteriormente.

Recordó que en la planta de Hermosillo se fabrican mil 71 unidades y laboran 3 mil personas en total, pero con los ajustes en el tercer turno se despidieron a 450 de los 600 que se tienen previsto recortar.

Ya antes Vidal Ahumada había informado al caerse el ensamble del Focus que podría ensamblarse en la capital sonorense un automóvil eléctrico o híbrido de Ford para el mercado de Estados Unidos.

Así las cosas, no todo está perdido en Dinamarca. Aunque no está de más tomar precauciones, para no seguir poniendo todos los huevos en una sola canasta. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)

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