Daniel Gutiérrez Ledesma, daba voz a las noticias.- Cajeme requiere un cuerpo de regidores capaces de construir, no para cobrar venganzas.- El PRI podría enviar a Raúl Ayala, Antonio Fornés y quizás se decida Emeterio
Bernardo Elenes Habas
Los cantores de catedral, con voces e instrumentos musicales espléndidos, desgranaban el poema
profundo, lleno de amor y gratitud de Violeta Parra… “Gracias a la vida que me ha dado tanto/ me dio dos luceros que cuando los abro/ perfecto distingo lo negro del blanco/ y en el alto cielo su fondo estrellado/ y en las multitudes los seres que amo…”
Así despedían, después de la misa de cuerpo presente en el templo señero de Ciudad Obregón, al periodista, padre ejemplar, amoroso esposo, noble y generoso amigo, Daniel Gutiérrez Ledesma.
Como reporteros, él en la radio y yo en los medios de tinta y papel, recorrimos juntos muchos caminos. Conferencias, entrevistas, campañas, giras de funcionarios, acontecimientos imprevistos sacudiendo el sentimiento colectivo de Cajeme.
Siempre amable. Siempre dándole luz y reconocimiento al trazado profesional de sus amigos. Siempre preocupado por las injusticias sociales.
Terminaban las giras de los políticos. Las visitas a comunidades y espacios de trabajo de funcionarios públicos. Los actos
de encuentros de representantes populares o se abrían frentes de protesta de padres y madres de familia por fallas en las escuelas. Y luego de recoger los datos, los argumentos de los personajes del acontecer público, él se iba a cabina, a darle voz a las noticias; y yo a la redacción del Diario, a convertir en letras la información.
Era parte de la convivencia cotidiana de Daniel, no solamente conmigo, sino con quienes recorremos día a día los rumbos de la ciudad con libretas, grabadoras, micrófonos, cámaras en manos, para tomarle el pulso. Para construir los puentes que sirvan de enlace a sociedad y gobierno.
Pero también, solíamos coincidir en tertulias, en eventos sociales, donde reíamos y afloraban los sueños personales. La pasión por participar y ser
propositivos. La vena artística y creativa, que nos hacía olvidar quejas, reproches, venganzas, pasiones enfermizas que los malos políticos descargan en los periodistas, en los comunicadores, que sin duda, solemos también enfermarnos con tantos odios ajenos.
Emotivo, sin duda, el homenaje que ofrendaron a Daniel, sus compañeros del Stirtt, organizado por su amigo Francisco Contreras Vergara, director general del Departamento Jurídico del Comité Directivo de dicho sindicato a nivel nacional, quien estuvo siempre al lado de Gutiérrez Ledesma, en los momentos más difíciles de sus males orgánicos.
Caía la tarde. El sol desparramaba sus rayos postreros sobre la ciudad, y la caravana de vehículos enfilaba hacia el panteón de Nuestra Señora del Carmen, donde descansa ya, en el seno de la Madre Tierra, Daniel Gutiérrez Ledesma…
Como nunca, Cajeme merece a partir de la transformación que le espera, un Cabildo de calidad, inteligente y sensible a las necesidades comunitarias.
Es decir, que no se pierda en revanchismos y venganzas enfermizas entre partidos y oficiantes de grupos políticos. Por el contrario, que comience a construir para bien de todos, en lo material, en el rescate del tejido social.
No reinventando Cajeme, sino abriendo los cauces por los que transiten los anhelos de miles de familias, principalmente las más desprotegidas, las abandonadas de siempre. Las que merecen que les pongan atención sus autoridades, con el apoyo de los regidores sin excepción. No desperdiciando el tiempo en reyertas, discusiones interminables, sino aprovechando el trayecto de tres años para fortalecer con sensibilidad, inteligencia, pasión por la Casa Común que es el
Municipio, el trazado de su progreso.
Morena tendrá mayoría, y es notorio que sus regidores y el alcalde electo Sergio Pablo Mariscal, se dispondrán a trabajar por las alternativas de desarrollo que Cajeme requiere. Por promover el Municipio para que lleguen inversiones que, por supuesto, se traducirán en empresas, empleos, bienestar de las familias.
Pero también, por apuntalar la seguridad, mejorar los servicios públicos, atender las inquietudes de la juventud, cuyo presente y futuro no debe descuidarse un solo momento, sino definirle puentes por donde transiten hacia su preparación académica, técnica, artística, o de oficios nobles, buscando que no sucumban ante el flagelo de las drogas.
En ese sentido, los partidos, de acuerdo a la proporcionalidad de los votos obtenidos, tendrán un lugar en la estructura de regidores, y todo hace indicar que en el caso del PRI, podrían estar en el cuerpo edilicio Raúl Ayala González, Gilberto Domínguez Gil, Antonio Fornés, o un cetemista.
Aunque también se contempla la posibilidad de que Emeterio Ochoa se incorpore como edil. Pero la incertidumbre surge debido a que se prevé buscará ser dirigente municipal de su partido.
Faltan unos días para que se aclaren dudas.
Le saludo, lector.
