Este jueves 21 de diciembre estará el precandidato del PRI a la presidencia de la República, José Antonio Meade en Hermosillo, y la única información oficial al respecto es que no estará en los tacos de El Chino.
No es cierto. En realidad, el precandidato presidencial desayunará con la gobernadora al filo de las 7:30 de la mañana, para sostener después un encuentro con directores de medios de comunicación en un hotel al norte de la ciudad.
Posteriormente se reunirá con integrantes del Consejo Político Estatal, ex gobernadores, sectores y organizaciones y con la llamada clase política del PRI en la sede estatal del tricolor.
En la agenda trae también un encuentro con mujeres y jóvenes priistas; ésta se llevará a cabo por la tarde, y a las 19:00 horas se reunirá en privado con empresarios sonorenses en el Club Los Lagos, donde se presume habrá de realizarse el ritual del pase de charola, para que los hombres y mujeres de empresa se “pongan con su cuerno” para lo que se ofrezca en la campaña que viene.
Por cierto, nos reportan que el ex vicepresidente del Fideicomiso Impulsor, Alejandro Camou Aguirre andaba en días pasados ostentándose como cabildero de la campaña de Meade, presentándose así ante empresarios sonorenses, acaso con el fin de colectar fondos para la campaña, pero ya fue descubierto y nada tiene que hacer en esos menesteres.
Camou Aguirre estaría aprovechando las relaciones que hizo durante el gobierno padrecista, con los hombres del dinero en el estado, desde el fideicomiso mencionado.
Pero a Alejandro Caamou también se le recuerda como socio de una sospechosa empresa financiera que, durante aquellos años se dedicaba básicamente a utilizar la información privilegiada sobre la hacienda pública y los flujos financieros, para comprar deuda a proveedores, mediante la módica mochada del 30 por ciento.
Muchos empresarios proveedores, desesperados por la falta de pagos, y bajo la premisa de que “de lo perdido lo que aparezca” optaron por vender sus deudas, que los señores involucrados cobraban luego fácilmente aprovechando sus relaciones en el gobierno de Padrés.
Muy buena la gira que realizó el lunes pasado el coordinador de Vinculación de la Secretaría de Seguridad Pública, Juan Pablo Acosta, por ejidos y comunidades de la costa de Hermosillo, promoviendo la convivencia con los habitantes de esa olvidada zona rural poniente, donde las necesidades son muchas y los apoyos escasean.
El recorrido comenzó en el ejido La Peaña, donde se entregaron cobijas y alimentos para la cena navideña, así como dulces para la posada de los niños; se repitió en el ejido Plan de Ayala, el Mineros de Pilares, Kino Viejo, El Triunfo, Carrillo Marcor, entre otros.
Aprovechando que andaba por allá, Juan Pablo Acosta buscó un encuentro con el pequeño Eduardo, participante de un concurso de canto del programa Escudo Ciudadano, que a pesar de no ganarlo, conmovió a todos al componer e interpretar una canción que es el relato de su vida al lado de un padre con problemas de adicciones, a quien conocimos ya recuperado desde hace dos años. El pequeño tuvo su navidad con una bici nueva, un balón y otros juguetes.
Para terminar, el cierre en la colonia La Choya, donde junto al diputado David Palafox organizaron una posada y cena para los vecinos de allí y de Los Arroyos.
Por como veo las cosas, el nombre de Juan Pablo Acosta ya podría comenzar a incluirse en la lista de los posibles candidatos a diputado local por ese distrito (el XI), donde existe una lista nominal cercana a los 150 mil electores, de los cuales votan unos 90 mil.
Él dice que no está obsesionado con dicha candidatura, pero recuerda que en otras ocasiones el partido se la ha negado, ya que siempre es su hermano, Maloro Acosta quien es mandado a la competencia. Hoy, lo más probable es que el alcalde no vaya por alguna candidatura, así que él puede aspirar a que esta vez le den esa oportunidad.
Es un distrito difícil porque además de la zona urbana norponiente de Hermosillo, lo integran una serie de comunidades rurales bien dispersas y poco pobladas, tanto en esa zona como en el oriente: San Pedro, Molino de Camou, La Victoria, El Tazajal y otros poblados.
En fin, todavía falta tiempo para esas definiciones. Veremos qué pasa.
III
El cabildo hermosillense aprobó el martes pasado, por mayoría, un acuerdo para concesionar un predio a una organización de periodistas, donde éstos construirán una Casa Club, en la zona rural oriente. Esa organización la preside el colega y amigo Manuelito Borbón y en ella forman filas mujeres y hombres de la reporteada y de lo más plural.
Hubo un solo voto en contra y fue de la panista Elsa Velasco. Hubo también argumentos en contra, por parte de los regidores Israel Moreno Durazo y César Rascón, aunque después de una exposición de la síndica capitalina, Angelina Muñoz Fernández, terminaron votando a favor. Sólo Elsa Velasco votó en contra.
El proyecto fue cabildeado por esa organización de periodistas, de reciente creación, con la regidora Karina Lagarda Lugo, y con ello se pretende contar con un espacio para el desarrollo de actividades diversas relacionadas con la actividad del gremio, y también con fines recreativos y de convivencia, de la manera en que otros gremios cuentan con el suyo.
Bien por los colegas que se organizan, mal por la regidora panista, para más señas esposa de Carlos Tapia Astiazarán, que se mantuvo con su voto en contra, tratando de impedir que esta iniciativa pasara.
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