A 40 Grados (martes 26 de marzo)
Por Sebastián Moreno
¡Rediez! Parece que nuestro Presidente anda mal
Parece que deberemos acostumbrarnos a todo y a que nada nos sorprenda en esta flamante Cuarta Transformación.
Poco a poco muchos han ido asimilando las calamidades del Neoliberalismo y de las atrocidades políticas de ex presidentes como Carlos Salinas de Gortari y todos los que antecedieron a Andrés Manuel López Obrador (hablando de la época posterior a la Revolución (salvando por supuesto al general Cárdenas).
Ya vimos como se toman decisiones al estilo “me canso ganso” a pesar de que el costo es mucho mayor a lo que se elimina o descarta (el caso del nuevo aeropuerto, el gasto de mil 400 millones de pesos en la compra de pipas por la suspensión de los ductos de Pemex para evitar el “huachicoleo” con los efectos de pérdidas millonarias en el sector productivo y lo peor, no se ha erradicado el robo de combustible).
Y no podemos hacer a un lado el asunto de las guarderías o estancias infantiles y un sinfín de medidas y acciones que desde la Cuarta Transformación las presumen como el gran cambio que requería México para salir de esa crisis generada por la corrupción que, bendito Dios, ya se acabó.
Aunque muchos no lo saben, el dato es real y el no usar el avión presidencial que desde las primeras horas de su mandato envió a un aeropuerto en California para su venta, le está costando a los mexicanos la módica cantidad de un millón de pesos cada día de almacenaje y cuidado de esa lujosa aeronave que el señor presidente declinó usar en un afán por demostrar que no ocupa lujos y que puede desplazarse en vuelos comerciales, eso sí, mucho más económicos que lo que pudiera ser el avión presidencial, siempre y cuando no estuviera pagándose un millón diario por su almacenaje, dinero literalmente tirado a la basura y mejor ni ponernos a pensar qué pudiéramos tener los mexicanos con un presupuesto de un millón de pesos al día.
Pero como se trata de sorprender cada día, pues López Obrador la sacó por arriba de la barda pero de foul, al exigir al gobierno de España que se disculpe y nos pida perdón por la Conquista española donde según nuestro Presidente, el pueblo mexicano (que por esas fechas era integrado por aztecas y mayas entre otros grupos étnicos), fue sometido, humillado y doblegado y a poco más de 500 años, pues es hora de exigir disculpas.
Apegados a esa mentalidad hay que prepararnos para que en una de las próximas conferencias mañaneras nos diga que ya le va a pedir a Donald Trump que nos regrese Texas, Arizona y la Alta California, pues la operación que en su momento hizo el que es considerado el mejor vendedor mexicano, el general Antonio López de Santa Ana, no fue en las mejores condiciones y hay que devolver ese terreno ahora de la Unión Americana a México o quizá en una mejor negociación, que paguen la diferencia en precio y eso implicaría una gran cantidad de miles de millones de dólares para el gobierno mexicano.
Ojalá no se entere que en El Pinacate hay indicios de que hace miles de años cayó un asteroide porque va a exigir el pago de daños y perjuicios a alguna instancia interestelar.
Digo a como se ha visto nuestro Presidente, ya le falta poco para caminar sobre el agua, como certeramente se lo criticó hace unas semanas Brozo, el payaso Tenebroso.
Antes como antes… ahora como ahora
La famosa expresión del indio Cajeme debe tenerla nuestra alcaldesa Célida López Cárdenas como la frase de la semana, pues le tocó participar en un evento de prevención del delito donde estuvo el ex Comisario de Seguridad Pública, Jorge Andrés Suilo Orozco, a quien la presidenta cuestionó en redes sociales cuando se manejó la posibilidad de que se integrara al equipo de Seguridad Pública Estatal, haciendo señalamientos muy negativos sobre las supuestas condiciones en las que la nueva administración municipal encontró en la corporación policiaca.
La expresión “antes como antes… ahora como ahora” aplica porque Célida López mostró disponibilidad para coordinar esfuerzos con la Secretaría de Seguridad Pública Estatal donde David Anaya Cooley ha realizado una labor de reestructura de programas y no dudó en incluir desde hace meses, a Suilo Orozco justo en el área de prevención del delito.
Por cierto que en ese evento de alta importancia por ir a acciones de prevención del delito trabajando con alumnos de escuelas primarias, estuvieron los mandos de la Policía Estatal de Seguridad Pública, de la IV Zona Militar y algo inexplicable, no asistió el Comisario de Seguridad Pública, Luis Alberto Campa Lastra, cuando es una de las funciones principales la de prevención de los delitos.
Dicen los que saben que es una señal muy clara de que la alcaldesa Célida López Cárdenas tiene en la lista de sus 5 cambios al Comisario, lo cual hablaría de la congruencia y lógica porque el tema de la seguridad en Hermosillo ha caído muy fondo.
Incluso versiones no confirmadas oficialmente aseguran que el área de Recursos Humanos ya le pidió la bola con el pago de finiquito y todo a algunos administrativos que fueron dados de alta con la llegada de Campa Lastra, cuya oficina al parecer pudiera ser desocupada en los próximos días.
Los datos que circulan en Radio Pasillo de Seguridad Pública dicen también que hay un hombre que se encuentra en el proceso de pasar las evaluaciones del Centro de Control y Confianza y que una vez que suceda eso, se hará el cambio que desde el mes de diciembre se ha comentado.
La presidenta inició el trienio con la línea de atacar todo lo que fuera malorista y ofreciendo un cambio de rumbo en beneficio de los hermosillenses.
Poco a poco fue asentando su línea y si ahora a seis meses va por los primeros ajustes en su equipo de trabajo, hay que darle el voto de confianza de que moverá lo que no ha funcionado, porque ella lo sabe, un trienio es demasiado corto y no hay tiempo que perder, mucho menos cuando ella misma ha señalado las cosas que considera deben mejorar.
La ventaja que tiene en materia de seguridad es qué por parte de la autoridad estatal y los funcionarios de ese nivel, encontró armonía y disponibilidad para trabajar en el bien común que es garantizar mejores condiciones de seguridad para los hermosillenses, sin importar colores de partidos o declaraciones o rabietas hechas con anterioridad.
Foco rojo en el Fovissste
Donde las cosas pueden ponerse peligrosas es en la colonia Fovissste, ubicada a un costado del famoso Tianguis del Palo Verde, aquel que promocionaban como “El de la entrada bonita” una locutora que después fue diputada muy aguerrida en la época de Guillermo Padrés.
Los vecinos de este fraccionamiento se han unido para mejorar la seguridad, la limpieza y los servicios en el interior de la colonia y en esa unión, han pedido con tiempo e insistencia la intervención de la autoridad municipal para regular los espacios que ocupa un taquero y otro comerciante que maneja una cenaduría en el costado Norte de la colonia, colindante con el Camino del Seri.
De no tener respuesta favorable a su queja, anuncian que van a cerrar la vialidad en Solidaridad y Camino del Seri a partir del día 8 de abril, con lo que dan tiempo a que la autoridad haga su trabajo y eviten ese conflicto.
Y como es martes, viene lo bueno, lo malo y lo feo:
Lo Bueno: Las condiciones del clima que ya dejó de hacer frío y el calor todavía no llega de lleno, lo que permite disfrutar de mañanas y atardeceres agradables al menos por unos cuantos días.
Lo Malo: La falta de espacios de estacionamiento en todos los hospitales y clínicas del Gobierno, ya sea IMSS, ISSSTE o Isssteson, lo que afecta a miles de usuarios que acuden a consulta o para atención médica.
Lo Feo: Ver a jóvenes de escuelas secundarias y preparatorias con una evidente falta de valores morales al no respetar ni a sus propias compañeras de escuela y mucho menos a personas adultas que pasan cerca de ellos.
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