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A nadie le gusta andar con alguien que gime y gime constantemente. Puede parecer inofensivo descargar sus frustraciones, pero si vocalizar sus sentimientos negativos se convierte en un hábito, puede tener algunas consecuencias bastante perjudiciales.

Resulta que las quejas constantes no solo apagarán a los demás, sino que también pueden causar estragos en otras formas. Aunque es bastante obvio que las quejas pueden afectar tu estado de ánimo y la felicidad de las personas que te rodean, también puede tener un gran impacto en el funcionamiento de tu cerebro e incluso puede afectar tu cuerpo.

Como si necesitara cualquier otra razón para dejar de quejarse, considere estas cinco formas en que la negatividad constante puede dañar su salud.

1. Te hace más probable pensar negativamente

Cuanto más se queja, más probable es que piense en pensamientos negativos más adelante. Los neurocientíficos comúnmente usan la frase “Sinapsis que encienden el cable”, para explicar este concepto.

Cada vez que te quejas, tu cerebro se vuelve a cablear físicamente para que sea más fácil y más probable que esa reacción, también conocida como el tipo de pensamiento, vuelva a ocurrir. El pensamiento negativo termina engendrando más pensamiento negativo.

2. Puede dañar tu memoria

Las imágenes por resonancia magnética muestran que las quejas constantes pueden provocar una disminución del hipocampo, la región del cerebro responsable del funcionamiento cognitivo.

Un hipocampo más pequeño conduce a una disminución de la memoria y la capacidad de adaptarse a nuevas situaciones, entre otras funciones. Esto puede ocurrir incluso por unos pocos días de estrés y causar daños a largo plazo.

3. Aumenta tus niveles de cortisol (la hormona del estrés)

Cuando te quejas, aumentas tus niveles de cortisol, también conocida como la hormona del estrés. Los niveles crónicos de cortisol pueden llevar a una variedad de problemas de salud, incluido un mayor riesgo de depresión, problemas digestivos, problemas para dormir, presión arterial alta e incluso un mayor riesgo de enfermedad cardíaca.

4. Puede acortar su vida útil

Las quejas constantes no solo son malas en el momento, sino que pueden ser perjudiciales a largo plazo. Un estudio publicado en Archives of General Psychiatry encontró que los optimistas viven más tiempo que los pesimistas, con un riesgo 55 por ciento menor de muerte por todas las causas y un riesgo 23 por ciento menor de morir por insuficiencia cardíaca.

5. Hace que la gente que te rodea también sea negativa

Nadie quiere estar cerca de personas desagradables, pero si sigue quejándose, es posible que sus compañeros también adapten estos hábitos negativos. Escuchar a alguien quejarse hace que sea más probable que también sea negativo, lo que puede perpetuar el deseo de liberar todos esos pensamientos infelices.

Como dicen, los pájaros de una pluma tienden a juntarse, así que si quieres más positividad, busca personas que mantengan sus pensamientos amargos para sí mismos.

Al final del día, a veces se siente bien quitarse las quejas, pero si va a expresar sus sentimientos negativos, asegúrese de hacerlo de una manera productiva.

Si algo le molesta, tome las medidas adecuadas para eliminar o resolver el problema. Y si realmente tiene que expresar cómo se siente, simplemente asegúrese de limitarse a un período de tiempo asignado para la ventilación, y luego continúe.

Con información de simplemost

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