El gobernador de Ohio, Mike DeWine, envió cartas a las iglesias, sinagogas y mezquitas en el estado recordándoles las pautas de salud necesarias para evitar el contagio masivo de COVID-19.
Esto después de que un feligrés extendió el COVID-19 en al menos 91 personas después de un servicio religioso.
DeWine aseguró que en la carta comparte formas de proteger mejor a los fieles y procurar la salud de los feligreses.
El gobernador detalló el caso, señalando que todo ocurrió por un hombre de 56 años que asistió a un servicio religioso en un condado de Ohio el pasado 14 de junio.
En las semanas posteriores al servicio, al menos 91 personas de cinco condados, en edades de entre uno y hasta 67 años, desarrollaron síntomas de COVID-19.
“Nuestras creencias religiosas están en el centro de nuestro estado y nuestro país. Sin embargo, es vital para controlar la propagación del virus que cada vez que las personas se reúnan, incluso para los servicios religiosos, todos usen cubrebocas, practiquen distanciamiento social, se laven manos y se aseguren de que haya buena ventilación y flujo de aire “, dijo DeWine.
DeWine recordó a las personas que una forma de demostrar amor a los demás también incluye ‘protegerlos’ de este virus.
“Continuamos teniendo un problema de propagación debido a las reuniones informales entre familiares y amigos. Todos debemos recordar que aunque sean únicamente familiares o amigos existen riesgos pues cualquiera podría portar el virus y no saberlo”, aseguró DeWine.
“La verdad es que es más fácil tenerle miedo a un extraño que a un amigo. Mantener la distancia social y no reunirse puede hacer parecer que uno no es amigable pero, en realidad, es un signo de amistad y amor. Esto demuestra que quieres proteger a quienes amas de enfermarse ” puntualizó el gobernador.
Fuente: NBC Ohio
