En caso de que existiera alguna duda sobre si el presidente Trump tiene realmente un acuerdo secreto con México para detener el flujo de migrantes a la frontera de los Estados Unidos, sacó la prueba de su bolsillo en una manada de prensa el martes por la tarde.
La administración ha estado cautelosa sobre los detalles del acuerdo al que llegó el viernes con el gobierno mexicano en relación con el flujo de migrantes desde Centroamérica. Y el presidente mantuvo eso mientras hablaba con reporteros fuera de la Casa Blanca, diciendo que no podía discutir nada sobre el acuerdo.
Pero luego pareció que no podía resistir un pequeño show y no decirle:
“Ese es el acuerdo que todos dicen que no tengo”, dijo Trump mientras sacaba un papel doblado de su bolsillo interior y lo agitaba.
El día anterior, Trump había twitteado que su administración había “firmado y documentado completamente otra parte muy importante del acuerdo de inmigración y seguridad con México” que “necesitará un voto del cuerpo legislativo de México! …” Pero el ministro de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard , dijo en una conferencia de prensa el lunes que no había un acuerdo secreto, informó el New York Times. En cambio, dijo Ebrard, hubo un entendimiento de que ambos países evaluarían el flujo de migrantes en los próximos meses. Si la tasa de migrantes centroamericanos que cruzan México para ingresar a los Estados Unidos no disminuye, los países discutirán acciones más agresivas, dijo Ebrard.
Un alto funcionario de la administración dijo a NBC News que algunos elementos del acuerdo, que se anunció el viernes pasado, se acordaron hace meses. Por ejemplo, México aceptó el “despliegue de su Guardia Nacional en todo México, dando prioridad a su frontera sur”, algo que el New York Times señala que se acordó en marzo.
Trump sigue afirmando que el trato es nuevo y vinculante. “Esta es una página de un acuerdo muy largo y muy bueno tanto para México como para Estados Unidos”, dijo el martes, y agregó que “le encantaría” mostrar el contenido del documento a los reporteros, “pero se congelará”. “Actúenlo, lo detendrán, lo analizarán, cada letra”.
Eso es exactamente lo que uno de ellos hizo. Jabin Botsford, un fotógrafo del personal del Washington Post, logró tomar una foto que revela un párrafo del acuerdo “muy bueno” de Trump.
Esto es lo que dice:
“México también se compromete a lo inmediato…. leyes y regulaciones nacionales con el fin de identificar cualquier cambio que…. Trate de poner en vigor e implementar dicho acuerdo.
Si los Estados Unidos determinan, a su discreción y en consulta con México, después de 45 días calendario a partir de la fecha de emisión de la Declaración conjunta, que las medidas adoptadas por el Gobierno de México de conformidad con la Declaración conjunta no se han logrado de manera suficiente. “al abordar el flujo de migrantes hacia la frontera sur de los Estados Unidos, el gobierno de México tomará todas las medidas necesarias conforme a la ley nacional para que el acuerdo entre en vigencia a fin de garantizar que el acuerdo entre en vigencia dentro de los 45 días”.
Scott Anderson, miembro de la Brookings Institution que se enfoca en estudios de gobernabilidad, dijo a VICE News que el presidente no está técnicamente equivocado al decir que el gobierno mexicano ha aceptado algo. Pero en este momento, todo lo que tiene la administración de Trump es un acuerdo amplio y no vinculante.
“Lo que tienen ahora, lo que estaba en su mano, es la declaración que se firmó el 7 de junio”, dijo Anderson a VICE News. Esa declaración es un compromiso político, lo que significa que no es vinculante por el derecho internacional, y en base a lo breve que es el documento, Anderson dijo que probablemente se trate de “medidas generales y en términos generales”.
“El último párrafo, que es el único que podemos leer, dice que si las medidas que cometen en esta declaración son inadecuadas en los próximos 45 días, los Estados Unidos pueden, y el gobierno mexicano se compromete políticamente, a tomar las medidas necesarias. para implementar un acuerdo separado ”, agregó Anderson. México tendría 45 días adicionales para hacer eso. “Es un lento aumento de velocidad. Hay una pequeña concesión aquí ”, dijo.
Tal vez la próxima vez que el presidente llegue a un acuerdo secreto, vinculante o no, debería guardar los papeles en el bolsillo.
Fuente: Vice
