Hermosillo, Sonora, mayo 7 de 2019.- Durante los primeros seis meses de edad se recomienda la lactancia materna exclusiva al bebé, ya que con ello se adquieren una gran cantidad de beneficios para la madre y el hijo, informó Erika Martínez Carballo, pediatra neonatóloga del Hospital Infantil del Estado de Sonora (HIES).
A través de la leche materna es como se proporcionan todos los nutrientes que necesita el menor, enfatizó, además de las defensas que requiere en los primeros meses de vida, ya que no tiene la capacidad de producir como tal sus propios anticuerpos y es hasta después de los seis meses que lo hace.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda, después de los seis meses el periodo de lactación, comentó, que consiste en complementar la leche materna con la introducción de otros alimentos hasta los 2 años de edad.
“El principal beneficio de la lactancia materna es el vínculo que se genera entre madre e hijo, que es único y que está demostrado que es parte de la formación del bebé, este vínculo va a apoyar a la madre con toda la regulación de hormonas y disminuye como tal lo que es la depresión post parto”, explicó.
La especialista agregó que para la madre también reduce el riesgo de padecer cáncer de mama y ovario, además de ayudar a prevenir la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial y a regular el peso más fácilmente, ya que está demostrado que ayuda al organismo a que tenga una transición adecuada después del parto.
Respecto a los mitos que giran en torno a qué alimentos se deben de consumir o no durante la lactancia materna, Martínez Carballo señaló que es muy importante informarse adecuadamente y resolver las dudas, ya que este detalle puede hacer que se suspenda la lactancia.
Aclaró que todos los alimentos están permitidos, pero es bien importante que la mamá tenga una alimentación balanceada, suficiente y rica en nutrientes, porque ella se los está aportando a su bebé.
“Se dice que debes de tomar muchos atolitos, tomar avena, a veces esos alimentos son altos en grasas y son altos en lactosa, los bebés por su fisiología, sus intestinos son un poco inmaduros y no procesan adecuadamente lo que es la lactosa”, comentó.
La leche materna es baja en lactosa, explicó la especialista, por lo que los alimentos que consume la madre altos en lactosa a veces pudieran ocasionar cólicos, irritación o malestar en el bebé.
“Estos alimentos no están prohibidos pero si tratar de regularlos o balancearlos, como el café, el chocolate, alimentos como el brócoli, la coliflor, a veces el frijol, más que nada los picantes y los irritantes, todos esos alimentos pudieran pasar por el seno materno y ocasionarle malestar al bebé”, puntualizó.
La pediatra neonatóloga del HIES recomendó a las madres identificar en su dieta qué alimentos le ocasionan malestar al bebé y poco a poco tratar de disminuirlos, pero no eliminarlos porque no hay un alimento prohíbido, además se deben evitar las bebidas alcohólicas y el fumar, debido a que puede ocasionarle asma al menor.
Por último, apuntó que las mamás no pueden medir o saber qué tanta leche están produciendo y a veces tienen la percepción de que no lo llenan o que no producen suficiente leche, pero las cantidades que el bebé alcance a succionar son las suficientes para quedar satisfecho y nutriéndose adecuadamente.
