Cajeme tiene bases para nuevos horizontes.- No podemos ni debemos aflojar el paso, dijo Faustino Félix Chávez en su Tercer Informe de Gobierno.- “Nos vamos conformes, pero no satisfechos”, recalcó.- Reconoció, Jorge Vidal Ahumada, la capacidad de gestión y atracción de recursos del alcalde saliente
Bernardo Elenes Habas
Faustino Félix Chávez se despidió, ayer, de su potestad como Presidente Municipal. Pero reafirmó su responsabilidad de cajemense bien nacido, dispuesto a servirle siempre a su comunidad, desde las filas honrosas de la ciudadanía.
Sus palabras –durante la ceremonia del Tercer Informe de Gobierno, la mañana del sábado-, vibraron con una carga emotiva notoria, en la Sala de Cabildo de la sede de los poderes municipales, donde, representantes de los diferentes sectores de la comunidad llegaron puntuales.
Ahí estaban, entregándole un voto de confianza y su solidaridad ciudadana, el obispo de Ciudad Obregón, Felipe Padilla; don Javier Bours Almada, ex alcalde de Cajeme, al lado de los también ex presidentes municipales Eduardo Estrella Acedo y Sergio Gastélum de la Vega. La ex senadora Anabel Acosta. La ex diputada federal María del Rosario Oroz.
Los diputados locales Omar Guillén y Enrique Evangelista. Los regidores del nuevo Cabildo, Emeterio Ochoa, PRI, y Balvaneda Ochoa, de Morena, con la representación, ella, del alcalde electo Sergio Pablo Mariscal Alvarado.
Asimismo directivos de cámaras empresariales, rectores de universidades, entre otros actores de la dinámica social, educativa, económica, productiva del municipio. Y, con la representación de la gobernadora Claudia Pavlovich, el secretario de Economía, Enrique Vidal Ahumada.
Faustino habló claro, como es su costumbre. Con actitud autocrítica asumió la responsabilidad del trayecto administrativo, social y humano que la sociedad le confirió en el trienio 2015-2018.
Recalcó que su misión al frente de los destinos del Municipio la desempeñó siempre pensando y actuando de buena fe y gratitud hacia una comunidad a
la que ama, porque aquí están sus raíces, su sangre pasada, presente y futura, esencia del trazado humano, del compromiso irrenunciable que tiene todo ser humano con su casa solariega, común y sencilla, pensando en que a Cajeme, a sus familias les vaya bien en la próxima administración y en las que vienen.
“A Cajeme –expresó- lo traigo tatuado en el corazón y a donde quiera que vaya y donde quiera que esté, seguiré aportando mi mejor esfuerzo a la tierra que me vio nacer”.
“Veo –dijo- un Cajeme donde están sentadas las bases para alcanzar nuevos horizontes. Pero no podemos ni debemos aflojar el paso”.
Reconoció el esfuerzo noble y limpio de Ena, su esposa, al frente del DIF, emprendiendo y sosteniendo una responsabilidad que no buscó, pero que desempeñó
con fe y entrega, porque sabía que trabajaba para la gran familia cajemense, sus niños, sus mujeres, sus personas con capacidades diferentes y de la tercera edad.
“Nos vamos conformes, mas no satisfechos porque en conciencia sabemos que, a pesar del esfuerzo realizado, pudimos haber hecho más”.
Hizo un recuento de logros en pos del desarrollo de la comunidad, con el consecuente crecimiento del empleo, fortalecimiento de actividades deportivas, culturales, acciones de innegable contenido social.
No olvidó el tema delincuencial en los ámbitos común y federal, y pese a los esfuerzos realizados, se convirtió en un fenómeno que no pudo controlarse como se hubiera querido.
“Soy el primero en admitir que las estrategias no lograron reducir los homicidios dolosos y, hasta la fecha, siguen siendo el
principal problema de seguridad que tenemos”.
Habló claro y de frente, Faustino. Abrió sus sentimientos como el padre de familia, el ciudadano común, el ser humano que es.
Así lo entendieron y vieron los asistentes, reconociendo que, en esencia, aportó un esfuerzo legítimo que tal vez, en estos momentos, por el ambiente saturado de incertidumbre no trasciende como debiera, pero que el tiempo mostrará, algún día, sin pasiones, con la claridad de la verdad.
“A la vuelta de tres años –evaluó-, puedo decir sin temor a equivocarme, que avanzamos en muchos temas, pero también, reconocer que en otros aún hay mucho por hacer. Acepto y asumo el costo y las consecuencias de mis decisiones. La responsabilidad es mía y de nadie más”.
Por su parte, el secretario de Economía, Vidal Ahumada, forjó un amplio trazado del trabajo de gestoría de Faustino ante el Gobierno del Estado. Mismo que se tradujo en obras realizadas y otras en franco proceso.
Igualmente, hizo referencia a la apertura que marcó el Alcalde para las inversiones en Cajeme. Esencia concentrada en el desarrollo comunitario. Creando centros de empleo. Convirtiendo al Municipio en factor importante para la reactivación económica de la Entidad, a través de millonarias inversiones y mejoramiento de infraestructura, que tendrán, pronto, un positivo impacto en el desarrollo de la región sur de Sonora.
Le saludo, lector.
