Semana crucial para Sonora.- La pandemia alcanzará su máxima expresión durante estos días.- Amortiguar su crecimiento depende sólo de las familias.- Enrique Claussen, narra cómo un trabajador de almacén tuvo sólo una salida a hacer fila para comprar cerveza: resultó positivo y contagio a 6 compañeros.
Bernardo Elenes Habas
Las palabras de Enrique Claussen Iberri, buscan liberarse del aire de preocupación que las envuelve. No puede fingir, es un ser humano sensible.
Como todos los días, el Secretario de Salud de Sonora, se planta ante la conciencia de las familias y rxpone detalles sobre la verdad de la pandemia asesina del coronavirus.
Su voz pretende salir solamente con matiz informativo. Pero los verbos y adjetivos, las cifras que generan azoro en unos, pero también indiferencia en otros, van tejiendo una realidad inevitable:
El Covid-19, crece en Sonora. Principalmente en Municipios como Hermosillo, San Luis Río Colorado, Cajeme, Nogales, donde los indicadores de la enfermedad se disparan, y está previsto que durante la actual semana alcanzarán su máxima expresión, el “pico” anunciado por los expertos en Salud que traerá consigo deterioro orgánico de hombres, mujeres, niños, e inevitablemente la muerte, en muchos de los casos.
“Esta semana es crucial para Sonora”, expresó Claussen Iberri, advirtiendo que los contagios fueron y son impredecibles. De tal manera que cualquier persona en una fila, en un local donde no contemplaron la sana distancia, las medidas de higiene obligadas, pudo convertirse en el eslabón que encadenó en esos momentos y ahora, a muchos seres humanos al dolor, al sufrimiento. Y hasta a lo inevitable. “De esta manera tan sencilla, es como suceden los contagios”, dijo.
Y ejemplificó con el caso de un trabajador de un almacén. “Se fue a hacer fila para comprar cerveza. Esa fue su única salida y pensó que a él no le pasaríanada. Y no fue así. Se contagió de Covid y contagió a más de cuatro compañeros. Así de fácil, así de casual, de manera accidental los casos suceden cuando menos lo esperamos”.
Son, realmente, para reflexionar las exposiciones del Secretario de Salud. Porque los síntomas de la enfermedad no son inmediatas, tienen un periodo de incubación de 10 a 14 días. De tal manera que nadie puede detectar en qué momento fue contagiado.
Por eso, se vuelve necesario preguntarse: ¿quiénes, de aquellos que han realizado filas irresponsables para adquirir una dotación de cerveza, o para convivir como en tiempos sin restricciones sanitarias, tuvieron su encuentro con la pandemia?
¿Quiénes, para lograr los precios bajos de verduras y básicos ofertados en improvisados “mercaditos” promovidos por algunos políticos aspirantes a cargos públicos en el 2021, lucrando con la necesidad de las familias vulnerables, pudieron transmitir o recibir en esos efímeros comercios sin protección de cubre-bocas, sin sana distancia, la infección viral que ahora crece en Hermosillo, con 210 casos; San Luis Río Colorado, 206; Cajeme, 78?
Creo que en estos momentos y ante la realidad de lo que se vive, alcanza relevancia un mensaje que me envió mi amiga Irma Leticia Anduaga. Se trata de la figura del planeta Tierra portando un cubre-boca, y sobre él la siguiente leyenda: “Quedará en la historia que somos la generación a la que le pidieron ‘no hacer nada’. ¡Y ni eso pudimos hacer bien!”.
Le saludo, lector.
