Las casas de empeño y préstamos que han proliferado como conejos al igual que los casinos de apuestas en Sonora, son un lucrativo negocio que se presta al sospechosismo de lavado de dinero y de reciclaje de objetos robados al amparo de intereses políticos y de la delincuencia organizada.
Sobre los intereses políticos en la operación de las casas de empeño, al menos en Sonora queda demostrado por el reconocimiento del ex presidente Vicente Fox, de ser afectado por la clausura por parte de la Fiscalía General de Justicia de algunos de esos negocios que financiaban la Casa Fox.
En el portal de la colega Michelle Rivera, nos enteramos que el ex presidente Fox hizo una llamada al Fiscal sonorense Rodolfo Montes de Oca, para informarse sobre las clausuras realizadas a algunas casas de empeño con las que mantiene relación financiera.
“Son casa de empeño con las que tengo relación, son donantes de Casa Fox y que sintieron que su detención y cierre se dio de manera arbitraria, por eso estoy solicitando información para explicarle a ellos qué pasó”, señaló Fox Quezada.
En respuesta a Fox, el fiscal Montes de Oca le informó que las casas de empeño tuvieron hasta dos meses para poner en orden sus negocios, y que incluso sostuvieron previamente reuniones con legisladores del Congreso del Estado, en donde recibieron toda la información sobre la nueva ley que los obligaba a transparentar el origen de todos los artículos que posteriormente ponían en venta.
Luego de entender que esa reforma al código penal se realizó para combatir el robo a casa habitación, pues la mayoría de las veces el botín se lleva a las casas de empeño o recicladoras, Vicente Fox aplaudió esa decisión al considerarla lógica y acertada.
“Lo que pasa es que ellos me dijeron que sentían que era como una cacería de brujas, sin sentido y de manera arbitraria, pero si tuvieron un plazo para actuar y si ya conocían las reglas del juego y tenían que demostrar la propiedad legítima, lo deben entender y hacerse responsables”, agregó el ex presidente panista vía telefónica.
Además de avalar la reforma legal para limpiar las casas de empeño, Fox Quesada destacó el trabajo que está realizando actualmente en Sonora la gobernadora Claudia Pavlovich, a quien aseguró que estima mucho.
La sacudida de parte del gobierno estatal a las casas de empeños, hizo saltar a la liebre, resultando muy patona, como el ex presidente Fox, quien se siente afectado en sus intereses económicos al clausurar la Fiscalía una de sus fuentes de financiamiento para la Casa Fox. Otros afectados con intereses políticos y de otra índole, preferirán mantenerse en el anonimato.
Tampoco el mal es generalizado en las casas de empeño, porque en su mayoría esas empresas son inversiones honestas que arriesgan capital como en cualquier otro negocio, por lo que “no todo está perdido en Dinamarca”, y con el control impuesto por el gobierno de Claudia Pavlovich, habrá competencia equitativa para esas empresas, ya sin la mano negra de la delincuencia que hizo florecer a algunas por la compra-venta de objetos robados.
NO QUIERE SONORA CIUDADANA ELIMINAR RECURSOS A PARTIDOS
La propuesta del retiro total del financiamiento público a los partidos políticos es una demanda ciudadana generalizada en las redes sociales y en todos los medios, que hasta ya fue aceptada por el PRI, pero hay todavía voces que se oponen a esa medida porque sería inequitativa para los partidos para la elección del 2018.
La directora de Sonora Ciudadana, Leticia Cuesta Madrigal, consideró que con la eliminación del financiamiento público solo ganarían de inicio los partidos más fuertes, que son quienes tienen las posiciones de gobierno, el contacto y los compromisos con los empresarios sobre obras públicas, y porque son quienes históricamente han tenido la relación con los grandes inversionistas.
Lo único que acepta la lideresa de Sonora Ciudadana, es que solo se reduzca el 30 por ciento de las aportaciones que reciben los partidos, durante los años electorales, pero evitar que los ciudadanos tengan que sostener las estructuras partidistas cuando no hay elecciones.
Cuesta Madrigal dijo que con esta reducción extrema se pone en riesgo la forma de operar el sistema democrático si sólo se permite el uso de recurso privado, sobre el que los partidos no tendrían que rendir cuentas.
La lideresa de Sonora Ciudadana se quedará predicando en el desierto sonorense, porque será la única voz que defienda que se siga derrochando los recursos públicos para mantener a los partidos políticos y que sigan proliferando los “Niños Verdes” y más parásitos de esa calaña que solo ven en las organizaciones políticas un lucrativo negocio donde no impera la razón ni mucho menos las ideologías como sucede con la integración del Frente Opositor donde están en la misma cama personajes de chile, de dulce y de manteca.
El sistema de partidos no está en riesgo en México por la eliminación del subsidio a las organizaciones políticas, pues es de todos conocidos que los grandes grupos empresariales hacen sus aportaciones financieras para su operación, a cambio de obtener los grandes contratos gubernamentales.
Y el más claro ejemplo de sobrevivencia con escaso recurso público, es Morena. Se necesitaría ser muy ingenuo para pensar que el Peje López Obrador ha vivido del aire en la última década, y que ha financiado de su bolsillo una costosísima campaña por todo el país.
Lo cierto es que Morena y López Obrador son también de los damnificados por el terremoto, al eliminarse o reducirse el presupuesto electoral para el 2018 para destinarse a la reconstrucción, por lo que le urge instalar centros de acopio de recursos y pasar la charola más seguido a sus mecenas porque está a punto de quedar bajo los escombros, aplastado por la “Nomenklatura” del sistema político. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)
