Este jueves es un día de buenas y malas noticias para sonorenses con derechos políticos vigentes, ya que si bien se legislará para fortalecer los derechos de la mujer para participar con mayor equidad en política y la vida pública, así como para su protección, se dejan de lado otras reformas indispensables para modernizar el marco jurídico-electoral de la entidad.
Al filo del mediodía recibimos un comunicado oficial donde el presidente de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, Jesús Alonso Montes Piña, informó que, al no existir las condiciones de consenso para un sano debate, “decidió retirar el dictamen relativo a las reformas electorales, aun, con la oposición de varios diputados promoventes”.
Durante la mañana ya habíamos checado la Gaceta Parlamentaria, en donde se mantiene la exclusión del dictamen aprobado por los integrantes de la comisión antes citada, y que sí publica el dictamen aprobado por la Comisión de Igualdad de Género, que incluye modificaciones a varias leyes, entre ellas el Código de Instituciones y Procedimientos Electorales para el Estado de Sonora, en lo que se refiere a combatir la violencia política contra la mujer, paridad y demás.
Claridoso Montes Piña al explicar porqué luego de un par de meses en busca de consensos, fue imposible avanzar por “los intereses de una fuerza política acostumbrada a la polarización que nos condujo de manera irresponsable, a la paralización de la reforma electoral, aún en contra del mandato previsto en la Constitución Federal”.
Obviamente se refiere a la nomenclatura de MORENA y sus peleles en el Congreso del Estado que pastorea Ernestina Castro Valenzuela, quienes en Sonora van a contracorriente de lo que a nivel federal hace esa organización política, sesionando en lo oscurito, recurriendo al mayoriteo y a la extorsión para conseguir votos, además de pretender avasallar a órganos electorales mediante rústicas propuestas violatorias a su autonomía, con el pretexto de verificar su gestión de calidad.
Aquí operaron a toda capacidad para someter a cuatro diputados del PT y la cooptación de dos más, los primeros a cambio de proporcionar impunidad a la dirigente de ese partido, Ana Gabriela Guevara y los otros dos por conveniencias futuristas y lineamientos e instrucciones de dirigencias nacionales, para así construir una mayoría de la mitad mas uno, erigida como valladar para evitar la modernización de la normatividad electoral en los términos más amplios y que beneficiara a todos y no solo de forma directa a las mujeres.
Como decíamos, buena la descripción de Montes Piña del papel que hizo MORENA en este trámite: “Ese partido político que no quiere un piso parejo; reiteradamente hablaba de un supuesto golpe de estado al órgano electoral. Hay que recordar que históricamente quien argumenta eso es porque detenta el control y el poder de quien se dice sufrirá el golpe; espero no sea demagogia pura, porque quien recurre a esa postura para no construir tienen sello el despotismo”, aseveró.
En otras palabras, apunta que bajo las actuales condiciones, el Instituto Estatal Electoral de Sonora que preside Guadalupe Taddei Zavala es un instrumento al servicio del partido del presidente de la república y que distinto al Instituto Nacional Electoral, acá sí se deja mangonear por el oficialismo morenista y por eso el exitoso operativo para que su operatividad se mantuviera intocable y entendible entonces su rechazo a las reformas propuestas.
Y en efecto, los pocos personajes de MORENA con cierta capacidad para articular ideas, siempre rehuyeron el debate y se concretaron a emitir posicionamientos panfletarios y propios de pasquines, sin entrarle con seriedad a los distintos temas y cambios planteados, además de recurrir al vituperio y al insulto contra quienes se atrevieron intentar quitarles el control de su caramelo ubicado en la Colosio y la Rosales de la capital sonorense.
“Las distintas fuerzas políticas que mostraron su civilidad y el ánimo de construir para mejorar las condiciones del siguiente proceso, fueron prudentes en no caer en distintas provocaciones alentadas por quienes quieren a Sonora y al país polarizado, porque creen que la mejor forma de avanzar es tener divididas a las fuerzas políticas y a los ciudadanos”, apuntó el legislador sanluisino al zanjar lo que es una pérdida de oportunidad histórica para que los sonorenses dispusiéramos de una ley electoral acorde a las aspiraciones de la gente y no solamente las de un partido político.
En fin, así se dieron las cosas, al prefigurarse la primera alternativa de las tres que planteamos en los Entretelones de ayer, cuando había la posibilidad de aplicar una política espejo y revertir a favor de la modernidad electoral esa mayoría simple que permitiera incluir la reforma en el orden del día o sea construir esa mayoría mediante una buena negociación con María Dolores del Río y Luis Mario Rivera, del Movimiento Ciudadano y del Verde, respectivamente.
Pero lo mejor de todo es que hay plenas garantías para la buena salud de los integrantes de la representación popular sonorense, ya que al parecer el riesgo de contagio por el Covid-19 no será impedimento para realizar la sesión programada a partir de las diez de la mañana y dar trámite a un buen número de asuntos, quedándonos solo el pendiente si la diputada María Alicia Gaytán, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género ya aprendió a leer de corridito la palabra o b s t á c u l o.
En fin, el arroz no se coció del todo y todo indica que se impuso la sinrazón de un partido que en lugar de llamarse Movimiento de Regeneración Nacional, debiera llamarse Movimiento de Regresión Nacional, porque eso es lo que representa: Regresión.
Me comentan que hubo conferencia de prensa donde Jacobo Mendoza, dirigente florero de MORENA en Sonora y Ramón Flores Robles, del PT, se dieron a la tarea de explicar los motivos de su conservadurismo en materia de legislación electoral, ahí conde la citada Castro Valenzuela aceptó que las propuestas de reforma son buenas, pero que no les gustaron las formas o sea el modito.
No disponemos de mayor información sobre los esfuerzos para justificar lo injustificable y por supuesto, tampoco tenemos la menor idea como es que hicieron recular a Flores Robles de su posición inicial en favor de la reforma y que incluso hizo público mediante un manifiesto, sin que nadie nos informe si acudió a esa conferencia de prensa de pinicuchi.
Por lo demás, de acuerdo a los alocados y casi siempre fallidos pronósticos del subsecretario de salud federal, Hugo López Gatell, la escalada de contagios por el Covid-19 va para largo en Sonora o sea al menos hasta la primera semana de junio, lo cual nos hace prospectar que en realidad el pico de pandemia podría prologarse hasta fines de dicho mes o hasta más.
Y la verdad es que no se necesitan esas elucubraciones del funcionario federal para saber y constatar que en esta entidad la expansión de ese virus va para largo dada la irresponsabilidad de tantas y tantos que es alimentada por otros irresponsables con acceso a redes y medios de comunicación, que un día sí y el otro también exigen la apertura y la reactivación económica inmediata y que por motivos políticos o por simples ignorancias hasta les da cuestionar medidas para proteger a la gente de contagios.
Respecto al cronograma de reactivación económica en medio de la fase más peligrosa de la pandemia, no solo en Sonora sino a nivel nacional, ya quedó claro que quien decide esas medidas de apertura es el gobierno federal y que si bien dejó a Estados y municipios aplicar criterios autónomos para proteger a los ciudadanos mediante restricciones a la movilidad, corresponde a la federación determinar el cronograma de esa apertura en función de las tendencias pandémicas de cada municipio, Estado o región del país, tal como lo señaló la titular de la SEGOB, Olga Sánchez Cordero.
Por lo pronto, las condiciones en las principales ciudades de Sonora están muy lejos de considerarse adecuadas, ya que producto de esa campañita en favor de la reactivación inmediata, es creciente la movilidad social y por ende, creciente también el número de contagiados y muertos, los cuales seguramente escalarán en los días y semanas siguientes.
Pues en esas anda el secretario de Salud, Enrique Clausen, batallando para ese gran conglomerado ciudadano acate el llamado de quedarse en casa con el fin de evitar que sea rebasada la capacidad de atención a contagiados, tarea que debe ser frustrante, ya que según los índices de movilidad dados a conocer, en las principales urbes a penas se queda en casa entre el 30 y 40 por ciento de la gente.
Y en estos tiempos pandémicos no faltan a quienes les da por divulgar información falsa y sin más sustento que agravios reales o imaginarios del pasado, como esa relativo a que el exgobernador Eduardo Bours Castelo había sido contagiado y se encontraba muy grave, incluso intubado, lo cual afortunadamente el mismo exmandatario desmintió, no sin antes pitorrearse de los majes que le desearon ese mal.
