Si para algo ha servido la alternancia, antes que para democratizar la vida pública en el país, es para homologar al resto de los partidos que, una vez llegando al poder en municipios, estados y en la federación, en el discurso de la simulación que hasta aquellos tiempos del partido prácticamente único, sólo se le endosaba al PRI.
Así, tenemos que el partido que presuntamente reivindica con mayor énfasis la democratización de sus procesos internos y reclama con mayor vehemencia la equidad y transparencia en elecciones constitucionales, se apresta a elegir a su candidat@ al gobierno de la Ciudad de México, que se perfila como su más importante bastión en 2018.
La elección se hará, básicamente a partir de una encuesta que ya fue aplicada la semana pasada y cuyos resultados ya se conocen, aunque serán dados a conocer hasta el próximo jueves 24 de agosto. Al margen de que los mencionados en dicha encuesta han denunciado prácticas desleales para generar confusión, todo mundo da por hecho que al final, el que terminará decidiendo es el proverbial ❛dedito❜ de Andrés Manuel López Obrador.
El PAN, cuya doctrina y principios se recuerdan como los más precisos y contundentes en temas de combate a la corrupción, fomento a la democracia y demás, a estas alturas ha producido gobiernos tan corruptos como el de Guillermo Padrés, y con eso se dice prácticamente todo.
Aunque vale traer a colación uno de los mejores ejemplos del doble discurso, y ese corresponde al senador Francisco Búrquez Valenzuela. De unos años a la fecha, el señor ha articulado un discurso que básicamente se reduce en “más ciudadanía y menos gobierno; en quitarle el poder a los partidos políticos y dárselo a los ciudadanos”, lo cual suena muy bien.
Pero hasta donde se recuerda, el señor Búrquez era, en aquellos años 80-90, cuando no militaba en partido político alguno, un empresario de poca fortuna (y con esto no aludo al capital, sino a la suerte o la ineptitud). Aún más, podría citarse que su historia empresarial había estado signada más por el fracaso y el escándalo.
Algunos le adjudican la quiebra de la empresa distribuidora de tractocamiones Kenworth y el triste destino de las otrora exitosas tiendas de autoservicio conocidas como VH (Valenzuela Hermanos).
En realidad, su prosperidad comenzó a llegar cuando se metió a la política en el PAN y llegó a la alcaldía de Hermosillo, para desde allí convertirse en próspero empresario camaronícola, entre otras actividades.
Sucede también con algunos actores políticos que cotidianamente cuestionan las malas mañas preelectorales, las triquiñuelas publicitarias para posicionarse fuera de los tiempos oficiales con miras a eventuales candidaturas, pero desde ya se publicitan sin recato ni rubor, en grandes anuncios espectaculares donde se promocionan lo mismo programas ❛equis❜ que revistas de dudosa existencia y más dudoso financiamiento, con sus nombres y rostros en las portadas.
Recurso viejo, efectivo e ilegal, pero en lo que se terminan de adornar las instancias de fiscalización electoral con discursos acrisolados, transparentes y demócratas, pues que sea lo que Dios quiera y cada quien habla de honestidad y congruencia mientras le pega duro a la mapachería y la machincuepa.
En Sonora por lo menos dos han hecho uso de esos recursos: el senador Héctor Larios, que busca la candidatura a la alcaldía de Hermosillo (mínimo), y la diputada local Célida López, que se cobija en un viejo panegírico del padrecismo como Javier Villegas Orpinela, un leperazo de siete suelas cuyo historial requeriría uno o dos despachos aparte.
Por cierto, Célida López presentó ayer su segundo informe de trabajo como diputada y en el cierre de su discurso ponderó sobre la necesidad de llevar a una mujer al Senado. No es la primera vez que lo dice: ella busca ser candidata del PAN a la Cámara Alta y, según se pudo apreciar, tiene grandes posibilidades de lograrlo.
Claro, primero hay que ver qué dicen los otros aspirantes y, sobre todo, los democráticos procesos de selección interna en el PAN.
II
Otra raya al tigre de la actualización y las exigencias de los nuevos tiempos para la comunicación de Estado acaba de pintar la directora General de Radio Sonora, María Elena Verduzco Cháires al presentar a los integrantes del Consejo Ciudadano de esa radiodifusora y a quienes les tomó la protesta de ley, la coordinadora de Comunicación Social del gobierno del estado, Ivone Andrade.
Lo anterior, como parte del cumplimiento a lo establecido en la nueva ley de telecomunicaciones para radio y televisión.
La lista de consejeros la encabeza el decano del periodismo sonorense, don Carlos Moncada Ochoa; las colegas y amigas Judith Franco Aínza y Alma Noelia Neria Lara, así como el ingeniero Francisco Carlos Luna y el doctor Arturo Valencia Ramos.
Junto con ellos, rindió protesta la también colega y amiga Soledad Durazo Barceló, como Defensora de Audiencias, una nueva figura incluida en la nueva legislación y cuya función es la de servir como interlocutora entre los radioescuchas y el medio, para contribuir al cumplimiento de los códigos éticos y los compromisos editoriales asumidos por el medio, en este caso Radio Sonora, con el fin de fomentar la participación ciudadana en la mejora y apego de los contenidos programáticos al servicio del público.
Es importante señalar que tanto los consejeros como la defensora de audiencias, fueron elegidos tras un largo proceso que inició con el lanzamiento de la convocatoria respectiva, la recepción de los currículos de los interesados, mismos que fueron turnados a la Universidad de Sonora, donde fueron analizados por especialistas, que los seleccionaron en base a su perfil.
Con esto, se da un paso más en el camino de modernizar los contenidos de la radio a partir de la apertura de nuevos canales de interacción con las audiencias, lo que se traducirá en una mejor programación y en una mayor cobertura, pero sobre todo, en la incorporación de voces ciudadanas, que finalmente son las que con su interacción, empujan hacia la democratización de los medios.
III
Alguien mencionó la posibilidad de que el ex gobernador Eduardo Bours y el ex alcalde de Hermosillo Guatimoc Iberry integraran una fórmula para competir por la vía independiente, como candidatos al senado de la República.
Le mandamos un whatsapp al Guaty para preguntarle al respecto. Su respuesta fue: “Arturo estoy fuera de la ciudad, regresando nos ponemos en contacto” un abrazo”.
Mi respuesta: “Gracias. Saludos” pero sí la están pensando?
La suya: “Así es, Arturo”.
La mía: “Eso! A ver cuándo platicamos”.
La suya: “Nos ponemos de acuerdo la semana entrante. Cualquier cosa antes, yo te aviso”.
Hasta ahí.
IV
Bastante ruido hizo, como suele suceder cada vez que aparece en medios nacionales e internacionales, la entrevista que le hicieron a Manlio Fabio Beltrones en el influyente periódico español El País, en la que retoma el tema de los gobiernos de coalición, los distingue de las coaliciones de facto que hicieron posible las reformas estructurales a partir del llamado Pacto por México, y sostiene que en la coyuntura actual, el PRI debe desdoblarse a la izquierda.
El tema fue motivo de análisis entre un grupo de periodistas, que proyectaban escenarios más bien apocalípticos en los que las sucursales de la Editorial Progreso (ðÿðÀð┤ð░ÐéðÁð╗ÐîÐüÐéð▓ð¥ ðƒÐÇð¥ð│ÐÇðÁÐüÐü) serían tomadas por asalto en los próximos días, por hordas de millenials tricolores desesperados por aventar al carajo sus Calvin Klein, sus Ray Ban, sus bolsas Prada y abrevar del marxismo leninismo, tomar como logos de campaña la hoz y el martillo, y como slogans el “patria o muerte, venceremos”
Hipérboles aparte, lo cierto es que muchos interpretaron el mensaje de Manlio como una reserva hacia quien aparece como el más probable destinatario de la eliminación de los candados, José Antonio Meade, y como un llamado a los priistas a replantearse la conveniencia de seguir desdoblándose a la derecha, como ha ocurrido desde 1982, cuando emergió la tecnocracia que llevó a Miguel de la Madrid Hurtado a la presidencia, y luego a Salinas en 1988.
Pero bueno, si en estos días el PRD, que nació precisamente después de esa fecha como aglutinador de las fuerzas de izquierda en el país, está trabajando una alianza con el PAN, cualquiera podría pensar que los priistas, ya desdoblados a la izquierda, recuerden su pertenencia a la Internacional Socialista y entonces sí agárrense, porque resulta que no sería El Peje quien quiere convertir México en Venezuela o Cuba, sino los herederos originales de la Revolución y la Reforma, esquina con Lázaro Cárdenas y López Portillo”
Total que ya no entiendo ni madres, así que mejor aquí la dejamos.
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